Cerro de San Miguel

Por qué visitar el Cerro de San Miguel

Si te gusta caminar y descubrir lugares maravillosos rodeados de naturaleza, te sugerimos subir hasta la cima del cerro para conocer la Ermita dedicada al Arcángel San Miguel, actualmente está en reparación, ya que se dañó con el terremoto del 19 de septiembre del 2017 y sigue en reconstrucción, pero aún así vale la pena subir porque hay 4 miradores en diferentes puntos en los que puedes apreciar el pueblo, el campo, el amanecer o atardecer y tener las mejores vistas del volcán Popocatépetl.

Y si eres curioso y rodeas el cerro estando en la cima vas a encontrar un columpio que es muy famoso en redes sociales por las increíbles fotos que puedes tomar desde este punto. Eso sí, llega temprano porque es probable que te toque hacer fila si hay mucha gente.

También es común ver a familias pasear en esta zona o a niños jugando en la Plazuela de la Danza donde año con año cada último domingo de septiembre se lleva acabo la fiesta tradicional “Huey Atlixcáyotl” muy importante en Puebla.

Festival Huey Atlixcáyotl

Diferentes comunidades de Puebla como mixtecos, otomíes, mazatecos, criollos, totonacos, tepehuas y popolocas se dan cita cada año el último fin de semana del mes de septiembre en el Cerro de San Miguel para llevar a cabo este festival lleno de historia y tradición.

Se realizan danzas regionales y las que más llaman la atención de todo aquel que asiste a este festival son las mojigangas, tecuanis, los negritos, quetzales, voladores y las pastoras. También se hace un concurso muy interesante en el cual se elige a la Xochicíhuatl (Mujer Flor) y a sus Xochipilme (Florecitas) y gana aquella que se sepa y explique mejor sus costumbres tanto en su lengua materna como en español.

El Huey Atlicáyotl es declarado Patrimonio Cultural del Estado de Puebal el 29 de julio de 1996.

Capilla de San Miguel

Esta se encuentra en la cima del cerro y aunque por el momento está cerrada, se puede acceder al atrio y desde ahí admirar el valle. Esta fue construida en el siglo XVIII y cada 29 de septiembre cientos de fieles vienen a festejar al Arcángel San Miguel. En ocasiones esta celebración coincide con el Huey Atlixcáyotl y hace que la fiesta sea todavía más grande.

La escultura del Arcángel San Miguel es guardada cada año en la Iglesia de la Soledad y la sacan 8 días antes de su celebración para subirla a la capilla. También se cuenta que tenían la escultura del diablo hecha de madera, aproximadamente 45 centímetros y esta se colocaba a los pies del Arcángel. Al terminar la fiesta, guardaban al diablo en la Sacristía del Ex Convento de San Francisco, donde lo amarraban a un tubo con una cadena y viendo hacia la pared. Pero pasando los días se daban cuenta que había personas que creían en él, encontraban amarres y figuras con la espalda del diablo y eso a los curas no les pareció así que decidieron encerrarlo en el sótano y no se sabe de él desde 1985. También existe la versión que alguien en la fiesta al calor de las copas lo tomó y lo fue a vender para poder comprar más bebida.

Es muy común que durante el mes de septiembre se escuchen las mañanitas (en diferentes versiones) por los altavoces de la capilla y esto hace que se escuche en todo Atlixco.